miércoles, 24 de agosto de 2016

La Corte Suprema que viene: La posibilidad del liberalismo igualitario - El Economista


Nos consultaron sobre la asunción de Rosenkrantz como Juez de la Corte Suprema, acá en "El Economista" junto a Patricio Nazareno (acá su entrevista). Conozco a Rosenkrantz desde que era estudiante en la Facultad de Derecho UBA y desde que egresé estoy en su Cátedra de Teoría General del Derecho. Fue la primera persona que me saludó cuando gané el primer premio en el Concurso Homenaje a Carlos Nino, su maestro. Ni bien me entregaron el premio, en una jornada en la que estuvo Alfonsín, entre otros muchos líderes políticos de varios partidos, se acercó a felicitarme, con una humildad de un grande. Lo recuerdo bien porque no conocía a mucha gente en el ambiente y fue una de las tres personas que se acercaron a saludarme y charlar amablemente. Obviamente nadie me conocía.

Tierras liberales, prácticas liberales - Berkeley 2016
Muchas cosas y mucho tiempo pasó y en su cátedra, en la que tengo un cargo concursado, ofrezco Estudios Críticos del Derecho y Teorías Críticas de la Justicia. Ambas materias son una mezcla de tradiciones que van más allá de las tribus académicas segmentadas por autor o tendencia política. Vemos Nino y vemos Marí, vemos marxistas y liberales, vemos analíticos y continentales, tratando de ir más allá de las grietas que suelen separar Foucault de Habermas, separan las teorías feministas de las teorías que piensan raza y clase social con el género, Rawls de Carl Schmitt, Kelsen de Weber, Derecho de Ciencias Sociales; en esa práctica que piensa en las personas y en su color político, en lugar de analizar sus ideas y razones.

En ese espacio invité a activistas sociales, políticos, hemos organizado debates con todas las agrupaciones políticas de la Facultad, desde el PRO al PTS, radicales y peronistas, han venido feministas de varias y diversas tendencias, entre otras actividades, y siempre ejercí mi libertad académica sin episodios de autoritarismo ni persecución o maltrato grotesco. Me gustaría decir que eso no pasa en otros espacios académicos pero estaría mintiendo y está muy bien documentado.

Con Rosenkrantz tengo varias coincidencias, muchos disensos pero infinito respeto intelectual. Como dije “En muchos sentidos creo que Rosenkrantz podría seguir una línea interrumpida por la renuncia de Genaro Carrió y Jorge Bacqué en la Corte de Alfonsín, dos jueces liberales emblemáticos y atípicos”. Ojalá así sea.

Le deseo éxitos a CR y a su equipo y salud!

Algunas de las cosas que afirmé sobre la Corte y su posible aporte y perfil:

- Sobre el liberalismo y la Corte dije: “Carlos Nino solía decir que el liberalismo conservador, en Argentina, era más conservador que liberal. En la Corte hace falta un liberalismo serio y consistente para reafirmar el liberalismo de la Constitución. Liberales conservadores –siempre más conservadores que liberales– en la historia de la Corte sobran, lamentablemente. Abundan los liberales antidemocráticos o antirrepublicanos, incluso en nuestros días. Reales liberales igualitarios son los que faltan. Liberales en serio. Y más liberales igualitarios consistentes.

Estado laico, autonomía privada, igualdad de culto, diversidad sexual, de género y étnica, respeto de los derechos individuales clásicos, políticos y sociales y de las garantías constitucionales son áreas en las que la Corte necesita una jurisprudencia más sólida y efectiva.”  

- Sobre Rosenkrantz, el activismo judicial y algunos contrapuntos dije: “Sus posturas sobre el rol judicial auto-restrictivo suelen sonar conservadoras pero son más consistentes democráticamente que aquellos jueces que quieren solucionar todo redactando hermosas sentencias que quedan en palabras muertas cuando la atención mediática pasa. Menos activismo judicial, desde mi punto de vista, puede ser más política democrática”, agrega Arrimada sobre una caracterización posible de su perfil.

Y señala sus puntos de disidencia con el nuevo juez: “Obviamente hay muchos aspectos de disenso razonable con sus posturas y teorías. Sus postura restrictiva sobre los derechos sociales -me inclino más por la postura de Bruce Ackerman o Carlos Nino en este punto- y el apoyo parcial a las posturas que sostienen la ‘Cosa juzgada írrita fraudulenta’ son mis reparos más fuertes”.

Ahora sí, éxitos y salud!