Volvimos de viaje. Malas noticias nos trajeron antes de tiempo. Vimos partir a personas que nos vieron nacer, que nos enseñaron a manejar, a tomar mate, con las que crecimos. En definitiva, que nos criaron. También pusimos pañales a personas que nos pusieron pañales siendo niños. El blog estaba de duelo y el duelo siempre habla el lenguaje de los silencios. Salimos de la parálisis como podemos. Dejamos este prefacio de uno de los libros de nuestro músico favorito, John Zorn, que nos diera inspiración en nuestra estadía californiana, entre tantos duelos superpuestos, entre la distancia y las sombras que ya se asomaban.
QEPD y salud!
Sentido pésame. Zorn es un buen antídoto contra el dolor. Bien Ahi.
ResponderBorrarMuchas gracias y salud!
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