sábado, 22 de diciembre de 2012

Haikemas ┼ Cocosuma - Charlotte's on fire


bravezas horizontales en un mar impar - Sao Paulo 2011
Más y más Haikemas, esto es, algo en el trayecto del haikus al poema, del gran CV en su tercer entrega! Salud!

XXXXI --

en la habitación de un hotel demolido
dos delirios se hacen sabiduría
cual fuegos congelados en la eternidad
y el sol envidia esa impar intensidad

XXXXII --

fieles escalinatas en un día inundado de gris
celeste timidez con el poder del conjuro
manos de protección que se estrechan por primera vez
una acción directa hacia la utopía

XXXXIII --

aun hoy quisiera beber de su conmoción amorosa
tocar sus miedos, sacrificarlos en el altar
hacerlos desaparecer como la sal del mar entre mis dedos
y con las cenizas de esa revolución encender los horizontes

XXXXIV --

orfandad de miedos a la autoridad
tantos hijos como espejos y triángulos isósceles
una tortuga invernando su sentimiento
encontrar la paz en un trote a caballo

XXXXV --

un brazo bajo su cuello de cristal
un pecho que no toce ninguna duda
un sueño palpitado por ecos del corazón
un despertar sudando un loop sexual

XXXXVI --

una rafaja de leyenda, la erección de un bosque
quemamos esa mansión celebrando con ajenjo
leyendo poesías, respirando humo y terror sin lamento
el sillón se encendió con la chispa de tu frágil caparazón

XXXXVII --

y cerraba los labios mientras los ojos se besaban
fragancia de pétalos secos y nostalgia espinosa
echada en una cama desarmada furiosamente
aura de alas en su espalda de morocha mariposa 

XXXXVIII --

cual escritor inspirado, un ser súbito, inesperado
descubrió en la cicatriz de su memoria poética
los azares delicados, los caminos cruzados
los versos irradiando esa inicial intuición

XXXXIX--

plegarias al mar, rezos al fuego
susurros al viento, arenas sensuales
un coito prohibido en la hora impar
vivir luego que lo vital nació, explotó, reencarnó

XXXXX --

los ojos inquietos, se perdían en ese techo y más allá
en el sudor se ahogaron sus miedos de ayer
en la cama crujiente cabalgó lo que eligió
lo que se quiere se defiende con ferocidad

XXXXXI --

si el recuerdo es un eco estremecedor
la intensidad del deleite fue abismal
mordiscos, uñas, secretos, complicidad criminal
estremecedor es olvidarlo para recordarlo

XXXXXII --

y en cada grito mudo, un ramo de flores, de voces
de mil ayunos deseados, una masión de disimulos
de pasiones ahogadas, un verdugo sol furioso
nos condena a encerrarnos en esa habitación de recuerdos

XXXXXIII --

mis manos encarnadas en su piel
brotadas enredaderas de su perfume hormonal
sed de mares corporales en la boca
finas capas de aire sensual que cosechar

XXXXXIV --

el infierno es la amistad con el aroma del azufre
el purgatorio una profundidad de tibios vomitados
San Pedro, un mito cínico para adictos celestiales
la tierra un patio de juego para atrocidades eruditas

XXXXXV --

su sonrisa interior, en su dulce piel transpirada
su goce exterior, en la entrega total del palpitar
una gota de fuego sudada por el alma
en un árbol regado con sangre dura y existencial

XXXXXVI --

vale intentar, abrir algunas puertas, otras golpear
tiempo al tiempo, rayuelas y casualidad
esfuerzos con suavidad en los movimientos
las hojas soplan al viento, los árboles nunca sufren mis intentos

XXXXXVII -- 

arañazos, cicatrices en la memoria amorosa
sudor, lágrimas del desierto de la sinrazón
helado, el frío polar de la emoción primal
la luna, ojos en una arena intensa, inmensa

XXXXXVIII --

y en cada martes eterno, dormir arropados por pequeños espejos
en lo maternal que había en mi autoengaño utópico
y en cada sueño, nuestros destinos se confirman
los ascensores nos despiden, nuestros secretos dialogan sus silencios

XXXXXIX -- 

sin verguenza, ni pudor, todo mes, cada vez
puro sudor, puro ardor, manso como un cienpiés
sin ropa, ni aroma de duda, de dolor
sin deseo ni cura, dos cuerpos y un amor siamés

XXXXXX --

sembrando la semilla de más, dejé volar
la tristeza, su origen en el espejo roto del pasado
cuando el arte de amar bailó con la oscuridad
reencarné como un demonio de tasmania enamorado

CV (1990).





2 comentarios:

  1. (más espasmos disonantes en unos haikemas paralelo de la vecindad de JC)

    en el espacio de un taller demolido
    dos sabidurías se hacen ignorancia
    cual juguetes de ritmos sosegados
    y la luna envidia la amorfa claridad;

    arcos de luz que se tensan por
    primera vez al sol,
    delirios de ambientales estructuras
    demolidas por el rojo;

    certezas opacas opacan la otra certeza,
    aun hoy, las revoluciones de tantas
    tontas sílabas cifradas
    que podrían trastocar la medida del crepúsculo;

    orfandad de orfandades, ser la propia madre,
    el propio tutor y ser el árbol arreciando
    tempestades, toreando nubes, saber
    que los espacios son en realidad curbos;

    un hombro fuerte, pero tembloroso,
    unas piernas que bien podrían gatear,
    una voz actoral, impostada, complaciente,
    demasiados ojos para tanto mirar;

    el infierno es el descreimiento opaco,
    la necedad, fascinación por la cáscara,
    la obtusa sinrazón de adorar el nombre
    del árbol (pero no sus ramas errabundas);

    sin sed de abismos y temiendo
    entrar a un reino donde la sombra
    es lo que nombra la claramente injusta
    connotación fortuita de una historia,

    quemamos trocitos de pasado,
    miguitas de temores, sinrazones,
    baldosas y cercos, destronados,
    las chispas siguieron prendiendo fuegos fatuos;

    fragancia de nostalgias, abandonos, soledades,
    inmensa tentación de curar de ser remanso,
    aura de niño pálido y arrebolado, generoso,
    mientras los ojos se besaban

    mientras los ojos se besaban,
    los labios huían

    (lo que se quiere se defiende con ferocidad)

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  2. Antes que el año termine, gracias Juanita por otra entrega de JC. La verdad es que no conocía este poema. ¿Estará a caso en "Frangancias"? Me parece que es otro de los poemarios que no tengo en mi poder. No estoy seguro que ese fuese el título del libro. Lo encontré en una rara librería de San Telmo, lo tuve en mis manos, lo repasé rápidamente, me parece reconocer ciertos versos sueltos, así, forzando mi memoria, pero no lo compré (ni lo pedí prestado) creyendo que volvería a esa librería, no lo hice sino hasta que fue muy tarde y nunca más vi ese ejemplar y al tiempo, como todo, cerró la librería.
    Espero que el 2013 me lo puedas prestar. Salut y Felicidades, che!!
    Lucas.

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